El SEO debería de ser un pilar importante en el plan de marketing de cualquier proyecto cuyo principal activo sea una tienda online. Quizás al principio no reporte el retorno esperado (sobre todo si el dominio es de reciente creación) pero a medio largo plazo el tráfico orgánico será el que ofrezca rentabilidad al eCommerce.
Gracias a la variedad de plataformas existentes y su facilidad de uso, crear una tienda online podría parecer una tarea al alcance de cualquiera. Sin embargo, si de verdad queremos situarnos al nivel de la competencia, serán los pequeños detalles los que marquen la diferencia. Repasemos algunos de los más importantes a tener en cuenta.
1- HTML SEO friendly
Empezamos por una de las más conocidas: las etiquetas de HTML (encabezados, negritas, listas, meta etiquetas,…) se deben usar correctamente. Si has contratado una agencia de marketing online para que desarrolle tu tienda o si has comprado una plantilla premium, seguramente este punto esté sobradamente superado. Si no, es vital que revises las recomendaciones para su uso ya que son vitales para una correcta indexación del contenido.
En el blog de esta agencia seo en Barcelona dispones de esta y otra mucha información para superar este apartado con nota.
2- Estructura de navegación
Todas las plataformas de eCommerce te van a permitir categorizar los productos pero ninguna de ellas te va a explicar cuál es la forma ideal de hacerlo.
Hay que cuidar la estructura de navegación, de manera que dibuje un árbol de contenidos bien definido.
home -> categorías -> subcategorías -> productos
La url amigable también debe acompañar y reforzar esta estructura de navegación, incluyendo ordenadamente cada componente. Por ejemplo, para una tienda de muebles, para el producto “Mesa cuadrada” que está dentro de “Mesitas de centro” que a su vez es subcategoría de “Muebles de salón” una url válida sería:
dominio.com/muebles-salon/mesitas-centro/mesa-cuadrada
Contar con unas “Migas de pan” también supone una ventaja y es otra señal más que enviamos a Google para ayudarle a reconocer y explorar el árbol de contenidos.
Como remate, es recomendable enlazar entre sí contenidos que se encuentren al mismo nivel. Por ejemplo, podemos mostrar una lista de productos relacionados al final de la descripción de un producto (siguiendo el ejemplo, podríamos incluir enlaces a “Mesa redonda” o “Silla cuadrada”). O al dentro de la descripción de “Mesitas de centro” podríamos insertar enlaces a “Mesas de comedor” o cualquier otra subcategoría de “Muebles de Salón”. Recuerda que cada detalle cuenta para el SEO.
3- Texto abundante y cuidado
Más o menos es por todos sabido que Google da preferencia a páginas que contengan un número mínimo de palabras. Algunos recomiendan 300, otros 500, pero lo que está claro es que este requisito existe. Y otro concepto aún más conocido es que Google penaliza el contenido copiado.
Sin embargo al redactar las descripciones de las categorías y de los productos solemos olvidar esos dos fundamentos; es común encontrarse con tan solo un par de párrafos cortos como introducción de la categoría o, mucho peor aún, con el resumen de producto copiado directamente del catálogo del fabricante.
Por mucho trabajo que nos suponga, redactar este texto correctamente más tarde o más temprano dará sus frutos.
En el caso de las categorías, lo recomendable es no interferir en el proceso de compra. Es decir, que la introducción a la categoría no sea demasiado extensa y “eclipse” lo realmente importante que es el catálogo. Por ello debemos incluir una sección de “más texto” debajo del listado de productos y ahí será donde podamos introducir una descripción más amplia de la misma.
4- Palabras clave rentables
De nada sirve aparecer en el primer puesto de Google para una palabra clave si a la hora de la verdad nadie realiza esa búsqueda. Tampoco es muy sabio intentar competir desde el primer momento por palabras clave con elevado volumen de búsqueda ya que nuestra competencia nos lleva ventaja. La virtud está en el término medio.
El concepto “long tail” es uno de los más famosos en el SEO. En resumidas cuentas lo que se pretende es añadir “apellidos” a las palabras clave que, aunque resulte en un término menos buscado que el anterior, reduzca considerablemente el nivel de competencia.
Supongamos que “muebles de salón” tiene 1.000 búsquedas al mes pero que nuestra tienda online aparece en el puesto 19 para ese término. El resultado es que seguramente ninguna de esas 1.000 búsquedas termine haciendo clic en nuestro enlace.
Supongamos ahora que “muebles de salón de diseño” tiene 10 búsquedas mensuales. Si conseguimos posicionarnos en el TOP 3 para esa keyword ¡tendremos la oportunidad de captar alguno de eso 10 clics!
En este artículo ya hablamos sobre keyword research y podéis encontrar consejos y herramientas para que encontrar palabras clave rentables no sea complicado.
