Absolutamente todas las empresas deben realizar su adaptación al entorno digital si no quieren formar parte de la historia, que se las recuerde como aquellas que fueron, que existían antes… con un tono peyorativo de burla. Es inevitable que cualquier empresa, independientemente del tamaño o rubro de negocio al que pertenezca, tenga su propio espacio y actividad en la red si quiere permanecer activa. Es el signo de los tiempos y el empresario que no reconozca estos hechos tiene los días contados.

Por otro lado, nos encontramos a las empresas y negocios de todo tipo que directamente se crean por y para internet. Son aquellas que forman parte de pleno derecho de lo que se ha venido en llamar la cuarta revolución industrial.

En definitiva, todo el mundo laboral se encuentra sometido a una revolución, el cual se enmarca dentro del ámbito digital; los procesos de negocio, la creación y lanzamiento de productos y servicios, el marketing y promoción para captar clientes y aumentar en ventas, la fidelización de estos, la consolidación de una marca, las relaciones de feedback entre comercio y cliente y un largo etcétera forman parte del nuevo paradigma que se ha creado para el futuro de empresas, negocios y todo tipo de organizaciones mercantiles.

En relación a las empresas virtuales, esas que solo existen en internet, se abre un nuevo reto que inevitablemente provoca una serie de cambios en relación a la forma de efectuar las gestiones propias de cada empresa.

Las empresas que solo existen en internet

Como podemos comprobar, si nos movemos solo un poco por el medio virtual, el funcionamiento de las empresas y de los más variados modelos de negocio tradicionales que han funcionado hace 30 años ya no son útiles en la actualidad. En estos días, son las empresas tecnológicas las líderes mundiales y las que se apoyan en estas las que tiene mayores posibilidades de generar ventas y aumentar en ingresos.

La organización de las empresas digitales difiere bastante de las tradicionales, ya que trabajan en red con un modelo de crecimiento basado en la replicación de la estructura inicial creando muchos equipos iguales, pero a modo de células independientes entre sí, a imagen y semejanza de las neuronas de un cerebro.

Así mismo, las herramientas utilizadas para mejorar los resultados son completamente distintas a las que se usan en los medios físicos, pues son programas informáticos dirigidos a la mejora de la gestión de las empresas en entornos digitales. Son tantos los que existen en la red que puede llevar días al empresario o al profesional informático encontrar el más adecuado para las funciones específicas de la empresa. Afortunadamente, también existen comparadores de software empresariales gratuitos, como appvizer, que puedes conseguir en la dirección web https://www.appvizer.es/ desde la que tendrás acceso a más de 10.000 soluciones empresariales.

Con esta tecnología, los negocios podrán guiarse fácilmente por internet en busca de las mejores tecnologías para conseguir la optimización de sus procesos productivos y de gestión. Además, el empresario o emprendedor que quiera mejorar el rendimiento de su empresa con esta herramienta podrá hacer uso de las pruebas gratuitas que algunos editores ponen a su disposición cuando se realizan las búsquedas.

Otras diferencias sustanciales que hacen que el comercio electrónico tome distancias del tradicional es que son mucho más ágiles, sobre todo si cuentan con el programa necesario, consiguiendo que la burocracia quede reducida a su mínimo exponente. Además, mantienen el conocimiento de forma descentralizado basándose en un crecimiento colaborativo con la constante interacción entre otras empresas digitales.

Por otra parte, gracias a las iniciativas que favorecen el crecimiento desde abajo hacia arriba con las innovaciones, partiendo de cada uno de los equipos y con estructuras distribuidas, se consigue entender el mercado como un continuo feedback con el usuario y cliente para favorecer las investigaciones de mercado, tan importantes para tomar acciones correctas y eficaces.

Otra diferencia fundamental en las empresas digitales es que mantienen una transparencia total en sus comunicaciones, lo que ayuda a adoptar sin problemas todo lo 2.0 y lo referente a lo social, tan valorado en la actualidad por los consumidores, lo que ayuda positivamente a la posición de la marca y a la percepción que se tiene de ella.

Por otra parte, cuando nos referimos a la selección de personal, estas hacen una evaluación 360 que generalmente realizan varias personas, y no sólo las posiciones más altas de la jerarquía dentro de la empresa. Esta actitud se considera vital para comprobar su integración y el alineamiento real que tendrá el candidato en la compañía.